15 años recorriendo esta ruta.
Y mi vida es exactamente una montaña rusa,
que sube, que baja, que rie y que llora.
Que esta vida no responde a mis preguntas
pero algun dia entendere el porque de algunas cosas.
¿Por qué he desperdiciando tanto esta vida?
Pero por fin camino sola.
Aunque trompieze siempre con la misma piedra.
Tengo mi soledad y soy feliz.
Pero quiero dejar de vivir tan rapido.
Quiero dejar este juego donde las reglas no son mias.
Quiero encontrame.
Quiero desenamorarme.

Cada uno sabe lo que siente. Ninguno sabe lo que el otro siente. Solo nos "imaginamos".Solo nos mentimos.
Mentiras y más mentiras, solo para tapar la verdad.
La verdad que nunca fue y que nunca va a existir.
¿Y sabes quien tiene la culpa de TODO esto?
Los dos.
Vos por jugar conmigo
y yo por seguirte el juego.

Te busco, te encuentro y te miro. El momento en el cual tus ojos se chocaron contra mi, fue el momento en el cual me enamoré de vos.

Estoy creciendo;

Vi la cosas con tanta claridad, con tanta tranquilidad.
Tan solo era eso... pensar con la mente abierta, buscar, imaginar, soñar.
Entender los "porque" y entender que las cosas no te hacen mal, sino que te hacen crecer.
Estoy feliz.


PS; agradecimientos miles y miles a SAMUEL QUINTANA.
Gracias por regalarme un poco de tu claridad.

He pasado tanto tiempo lamentandome lo que no entendia... lo que no entendia de vos. De nosotros.
Es nuestro final (para vos).
Pero.. te pusiste a pensar, en algun momento, en alguna noche...si yo estaba conforme con la desicion ?
si sufrí, si lloré ?

-Todavía no llego el olvido, todavía busco tu nombre en mi corazón.- dije a media voz.
-No sientas culpa, el amor es así.- me respondió con sinceridad en sus palabras.
-Mi corazón no siente culpa de no poder olvidarte, siente culpa de amarte.- me retiré con lagrimas acariciando mi rostro.

Quiero un beso de desayuno.
Una sonrisa de almuerzo.
Un te amo de Merienda
Y una caricia de cena.

Sentir tus dedos enredarse con mi pelo y tus ojos clavados en mi.
Suspiro y te miro, por momentos no puedo apartar la vista, no quisiera perder ni un segundo de vos. Me besas y no existe nadie mas que nosotros dos.

Cada detalle, cada escena y cada palabra, todo bajo control.
Aquellos acercamientos, cada aproximación a a decir palabras incoherentes.
Esa noche el amor nos acarició y la suerte se puso de nuestro lado.
Por un instante no pude imaginar la vida sin ti, ni como seria yo, mi voz, mis gestos ni siquiera mi sonrisa.
Nada tendría respuestas a mis preguntas. La vida seria menos dos, seria menos uno.

Era un ángel blanco de esos de los que brillan sin parar, que te encandilan al mirar y enamoran finalmente. Termino siendo un ángel negro que trababa de ocultar su felicidad y aunque seguía brillando su corazón era oscuro y frio, triste y sin amor.